Betty
Vendedora Ambulante
Esta obra explosiva en color y emoción retrata a Betty, una mujer cuya sonrisa desbordante se convierte en el eje central del lienzo. Vendedora de dulces y cigarrillos en las calles de Bogotá, su alegría genuina es un acto de resistencia cotidiana.
El fondo naranja intenso, intervenido con envolturas reales de productos populares como Jet, Chocoramo y Trululu, conecta al espectador con el entorno urbano y popular donde transcurre su vida.
La técnica mixta, que fusiona óleo, acrílico, collage y textura, realza la expresividad de su rostro e integra elementos del arte pop con un enfoque hiperrealista.
Su gorro azul tejido, sus ropas desgastadas pero dignas, y la intensidad de su mirada cerrada por la risa, cuentan una historia de esfuerzo, esperanza y humanidad.
Betty no posó en un estudio: fue retratada en su ambiente de trabajo, y por ello esta obra también es un homenaje a ella. El 5% del valor de la pieza se destina directamente a su protagonista, como una forma de compartir el valor simbólico y económico de su imagen convertida en arte.